Me encantó mi estancia en La Calabaza del Peregrino Albergue. El entorno en el que se encuentra es maravilloso, ideal para pasear por los alrededores y disfrutar de la zona del río, donde hay un merendero muy agradable. Además, la terraza del albergue es un punto de reunión muy agradable para los peregrinos. Pero lo que más me impresionó fue la atención de Darío, el chico que me recibió. Fue super atento y amable, me hizo sentir como en casa. La cena que me sirvieron estaba buenísima, la comida es abundante y se come muy bien. Sin duda, una experiencia fantástica gracias a Darío y al albergue.

No se me ocurre nada. 😊

Mi experiencia en La Calabaza del Peregrino Albergue fue maravillosa. La ubicación es perfecta, ya que el camino pasa justo por la puerta del albergue, lo cual es ideal para los peregrinos que buscan acortar la última etapa. Ángela, el personal encargado, se aseguró de que no me faltara de nada, incluso cocinó una deliciosa cena para mí. El ambiente en el albergue era muy agradable, con otros peregrinos con los que pude compartir y disfrutar de un vino rico. Además, el pazo en el que está ubicado es simplemente maravilloso. Recomiendo dar un paseo por los alrededores, especialmente la zona del río donde hay un merendero muy agradable. La terraza del albergue también fue un punto de reunión muy agradable.

Nada, todo fue maravilloso 😊

El entorno natural es impresionante, con una zona al aire libre donde se puede disfrutar de comidas y cenas contemplando la naturaleza. Además, el paseo por los alrededores y la zona del río son muy recomendables.

El trato del personal es poco empático y la limpieza deja mucho que desear.

me sorprendió gratamente mi estancia en o faramello en La Calabaza del Peregrino. La comida en el bar era deliciosa y las camas estaban limpias y cómodas. También había gel en los baños y una terraza perfecta para relajarse. Sin duda, superó mis expectativas.

Falta de refrigeración para la comida, algo que me hizo dudar de su frescura.

El pazo maravilloso en el que está ubicado. Recomendable paseo por los alrededores. Terraza del albergue, punto de reunión agradable. Atención de Darío fue brutal, muy atento.

Nada negativo.

El albergue La Calabaza del Peregrino está ubicado en un pazo maravilloso. Las camas son cómodas y hay zonas para lavar y tender la ropa. La terraza es perfecta para relajarse y conocer otros peregrinos. Los baños están limpios y hay gel disponible. También ofrecen comida en el bar, que está bastante buena. En general, una buena opción para quedarse durante el Camino de Santiago.

Nada, todo bien 👍🏻